sábado, enero 15, 2011

Con menos temor a las matemáticas

Como ya sabes, la biomecánica me interesa. Después de haber leído varios recursos que exploran la biomecánica desde un punto de vista cualitativo, eludiendo --deliberadamente-- todo tipo de tratamiento matemático, me he topado con varios recursos que la analizan desde lo cuantitativo, con mayor profundidad, y con la promesa de otorgarme conocimiento que no encontraría en otros lugares (algunos ejemplos son uno,dosy tres). Para avanzar en mi comprensión de la biomecánica, veo que ya no puedo huir más de las matemáticas.

La verdad es que nunca le puse mucho interés a las matemáticas en la secundaria o durante mis estudios de ingeniería informática en la universidad. En cierto momento, llegué a generar un recelo, y hasta temor, hacia ellas: mi mente, hasta hace pocos días, se ponía en blanco al oír las palabras cálculo diferencial o cálculo integral.

Te comento que recientemente empecé a repasar las matemáticas, y que ahora entiendo que no tiene sentido tenerles miedo. Las matemáticas, en definitiva, son un lenguaje para expresar conocimiento de una forma compacta, exacta, estándar y --aunque no lo parezca-- simple, conocimiento que de otra forma requeriría explicaciones más elaboradas y complejas. Así, por ejemplo, una ecuación simple como F = m.a es el resultado de cientos de años de observaciones, experimentos y razonamientos efectuados por muchísimas personas alrededor del mundo; se trata de una forma sucinta de plantear algo que en palabras tomaría por lo menos un párrafo, y cuya exposición y justificación completas tomaría varias páginas.

Aparte de los libros de biomecánica que mencioné al inicio, otros libros en el campo de la salud no rehuyen a las matemáticas. Empezando por la venerable fisiología de Guyton que todos hemos usado en algún momento, hasta llegar a libros dedicados a la fisiología matemática o a diferentes temas de bioingeniería (¿Qué tal este: Fundamentos Matemáticos y Biomecánica del Sistema Digestivo?)

Te comentaré cómo me va con mi repaso de las matemáticas, y te hablaré de lo que logre entender y aprender utilizándolas.

sábado, enero 08, 2011

Amazon Kindle sí funciona en Ecuador

A quienes se preguntan si Amazon Kindle funciona en Ecuador, puedo decirles: Kindle sí funciona en este país, o al menos lo hace en la ciudad de Quito.

En el mes de julio de 2010 tuve la oportunidad de probar un Kindle de 6" (con carcasa de color blanco), poco tiempo antes de que Amazon anunciara los modelos de la siguiente generación, basados en la pantalla Pearl (con carcasa de color gris). En ese momento, la conexión con la red celular no funcionaba en las áreas de la ciudad de Quito en las que lo probé, que son zonas urbanas centrales con un alto nivel de cobertura de la red celular, a pesar de que el Kindle fue adquirido en amazon.com y enviado directamente a Ecuador, y de que Amazon aseguraba que sí había cobertura en Ecuador (de otra forma no hubieran vendido un ejemplar a un cliente en este territorio). En julio de 2010, las barras indicadoras de la intensidad de señal no se iluminaban en ningún grado, ni aparecía el rótulo de "3G", tras múltiples intentos. Esto no permitía acceder a Kindle Store desde el dispositivo o recibir inalámbricamente los ebooks adquiridos mediante el sitio web de Amazon; sin embargo, la transferencia de estos últimos mediante el cable USB suministrado funcionó siempre sin problemas.

Para mi sorpresa, la conexión a la red celular de los Kindle blanco y gris ahora (enero de 2011) funciona perfectamente en las mismas zonas de la ciudad de Quito, con un buen nivel de señal. Lo constaté por primera ocasión en noviembre o diciembre de 2010 con un Kindle gris de un amigo, en el cual pude acceder directamente a Kindle Store (esta persona me dijo que la conexión le había funcionado siempre, desde que compró el aparato unas semanas antes). En una segunda ocasión, pocos días después pero con un Kindle blanco de otra persona, nuevamente verifiqué, ingresando a Kindle Store, que la conexión con la red celular se establecía, y apenas hace unos días compré ebooks en amazon.com y estos llegaron automática e inalámbricamente en pocos instantes al Kindle. Hasta hoy no he probado la compra de libros directamente en Kindle Store del dispositivo, ni he utilizado un Kindle fuera de la ciudad de Quito.

Tal como lo sostiene Amazon, la conexión a la red celular no tiene costo adicional (en realidad no sé cómo habrán hecho las negociaciones con los proveedores locales de telefonía celular). En mi experiencia, no fue necesaria ninguna configuración especial; si tienes un Kindle que no logras hacer funcionar en Quito o en otra parte de Ecuador, lo único que te puedo sugerir es que te asegures de tener la opción de wireless activada y que en ese estado realices un reset completo*. Una vez que se haya reiniciado el dispositivo (proceso que toma alrededor de un minuto) mira si las barras que indican el nivel de instensidad de la señal están en gris o si aparece la señal de "3G", lo cual señala que has logrado conectarte exitosamente. Como ya expliqué, si aún así no funciona la conexión, puedes usar el cable USB para transferir manualmente los ebooks comprados en el sitio web, lo cual, en mi opinión, es apenas una pequeña inconveniencia comparada con las variadas ventajas de poseer un dispositivo de esta clase.

(* No recuerdo con exactitud el término que se usa en Kindle para este proceso, pero me refiero a un reinicio (reset o reboot) que conserva todas las configuraciones y los libros transferidos; no hablo de retornar el dispositivo a su estado inicial de fábrica (un "formateo" en términos cotidianos)).